Peregrinar y ofrendar es recordar el vínculo sagrado con la Tierra.
Te invitamos a participar en este encuentro especial junto al Mamo Guneymaku, en el territorio ancestral del Cerro Quitasol, montaña sagrada del Valle de Aburrá que resguarda caminos y altares construidos por los antiguos Niquías hace más de 1.500 años.
Será un espacio de ofrenda, fuego, palabra viva y conexión profunda con la Madre Naturaleza.
Si sientes el llamado, inscríbete y acompáñanos en esta jornada de respeto, conciencia y corazón abierto.
