Voces de la Madre Tierra

Hijas de la Tierra, Hijos del Sol

Tras años de peregrinaje interior, voy conectando cada vez más con la necesidad de abrir mi consciencia a lo puro y divino que yace en nuestra Amada Madre Tierra. Detrás del ruido de la sociedad occidental en la que habito, que es seguro se oye en tantas culturas y regiones a lo largo y ancho del planeta, veo la imperiosa necesidad de quedarme habitando el Sonido y el Silencio de la Vida y la Realidad de las Verdades existentes tras el velo de la ilusión.

Hijas de la Tierra, hijos del Sol

Me quedo poniendo consciencia en la realidad existente tras el caos, eso es: las risas, las miradas, la hermandad, la infancia, la tierra, el agua, así como los distintos elementos y su Espíritu; el arte, la lentitud, el gozo por lo pequeño y también lo puramente grande; una puesta de sol, un río, una cascada, el rocío, la humedad de la tierra salvaje; el Amor que se esconde tras las lágrimas, y también tras la ira, los corazones calientes, el perdón, la compasión, la humildad y la sencillez. El rendirse a lo grande del ser humano, a nuestra naturaleza divina, a sentirnos Llamas Vivas de Amor en comunión tras el velo, un velo que para muchas personas cada vez va siendo más y más fino y translúcido; uniendo cielo y tierra, vida y muerte. Allí nos encontramos, allí nos cantamos, nos abrazamos, reímos, bailamos y gozamos la Vida y el Espíritu, con esta canción.

 

Me llamo Eva González Menal, soy psicóloga de profesión y coordino un centro de psicoterapia ubicado en Ripollet, Barcelona (España). Mi dharma, mi ofrenda, mi camino de sanación transita por el ofrecimiento de espacios de salud psicoemocional en mí y en las personas. En compromiso completo hacia mi propia autorrealización y sanación, transito desde hace años el camino de vuelta a mi propio hogar: Mi Alma, hasta el fin de mis días. Para ello, me rindo a lo que Ella me pide y me señala: la música, la voz, las canciones, el ritmo, la sanación. Aquí estoy dando un paso desde este sentir, desde este transitar. ¡Un abrazo hermanos y hermanas!.

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